"En la literatura española existe una figura que es en realidad un mito, uno de los mitos españoles. Don Juan. Podría ser un mito freudiano a primera vista; es la pura masculinidad, energía sexual siempre en ejercicio. Es también nihilista. No tiene antepasados ni hijos. No respeta las leyes, no se sobrecoge ante los muertos; es el provocador universal. (...) no tiene ni siquiera madre. (...) Pero don Juan está dentro del orbe de la caridad y al fin se salva, no por amar, sino por ser amado. El amor en el mundo cristiano tiene la virtud de redimir (...). Quien vence a don Juan es una doncella nada sabia, imagen de la pureza. (...) El hombre en su pura dispersión sexual vive el instante como don Juan; gana cada uno de los momentos, pero si la pureza no viene en su auxilio, perderá toda la vida."
(María Zambrano, Hacia un saber sobre el alma)
Hermosas palabras, lástima que algunos hombres no quieran ser redimidos. Pero comparto que si un hombre no puede contemplar a una mujer sin verla como una posibilidad de placer, está perdido.