31 de enero de 2012

Soberanía alimentaria, una perspectiva feminista.

Fragmentos extraídos del artículo del blog de Esther Vivas: "Soberanía alimentaria, una perspectiva feminista"

La incapacidad para resolver la actual crisis de los cuidados en los países occidentales, fruto de la incorporación masiva de las mujeres al mercado laboral, el envejecimiento de la población y la no respuesta del Estado a estas necesidades, sirve como coartada para la importación de millones de “cuidadoras” de los países del Sur global.
(...)
El acceso a la tierra no es un derecho garantizado para muchas mujeres: en varios países del Sur las leyes les prohíben este derecho y en aquellos donde legalmente tienen acceso las tradiciones y las prácticas les impiden disponer de ellas.

Si las mujeres son la mitad de la mano de obra en el campo a escala mundial, una soberanía alimentaria que no incluya una perspectiva feminista estará condenada al fracaso. La soberanía alimentaria implica romper no sólo con un modelo agrícola capitalista sino también con un sistema patriarcal que oprime y supedita a las mujeres.

Avanzar en la construcción de alternativas al actual modelo agrícola y alimentario implica incorporar una perspectiva de género. La alternativa de la soberanía alimentaria al modelo agroindustrial dominante tiene que tener un posicionamiento feminista de ruptura con la lógica patriarcal y capitalista.

La Vía Campesina, el principal movimiento internacional a favor de la soberanía alimentaria, lo tiene claro. Se trata de avanzar en esta dirección y crear alianzas con otros movimientos sociales, en especial con organizaciones y redes feministas, como la Marcha Mundial de las Mujeres. Promover redes y solidaridades entre las mujeres del Norte y del Sur, urbanas y rurales, y de éstas con sus compañeros para, como dice La Vía: “Globalizar la lucha. Globalizar la esperanza”.

Esther Vivas.

18 de enero de 2012

15 de febrero, fecha límite para suscripción a "Culturas Indígenas de Paz"



Recordamos que el límite para la suscripción es hasta el 15 de febrero.

La Asociación Laima (Italia) ya ha publicado el programa de conferencias.
Tendremos la oportunidad de escuchar de viva voz a personas que integran las pocas sociedades matrifocales que quedan en el planeta, junto a estudiosxs de la materia, académicxs y activistas. Concretamente, participarán:

- Dos mujeres Mosuo (China)
- Dos mujeres Khoesan (Sudáfrica)
- Heide Göttner Abendrot, prof. de filosofía, Alemania.
- Peggy Reeves Sanday, antropóloga, USA
- Genevieve Vaughan, Luciana Percovich, Mario Bolognese, Francesca Freeman, Iole Natoli, Diarmuid O'Murchú (Irlanda), Russell Means, nativo americano Lakota, etc...

Se trata de dar continuidad a las conferencias sobre matriarcados que se han venido realizando los últimos años por iniciativa de HAGIA. Consistirá en ponencias, seminarios, momentos de fiesta y celebración ritual.

¡En Revolución Matriarcal deseamos que la conferencia tenga mucho éxito!

16 de enero de 2012

Nacen más niñas como mecanismo natural contra las crisis.

Artículo original escrito por César-Javier Palacios para 20 Minutos.

Nacen más niñas como mecanismo natural contra la crisis.


Un reciente estudio publicado en la revista Science confirma que el miedo reduce el número de crías en los gorriones. Incluso aunque no haya depredadores cerca, si estos pájaros perciben el riesgo de que pueden ser cazados disminuye el tamaño de su descendencia hasta en un 40% . Es el coste del miedo, un intenso sentimiento generalizado en todos los animales como prudente comportamiento de supervivencia.

Nosotros también lo tenemos, y es en épocas de incertidumbre, como la terrible crisis económica que nos está tocando vivir a los españoles, donde la generalización de esta emoción se manifiesta de forma más sorprendente. Sin darnos cuenta, nuestra naturaleza animal ha puesto en marcha sus mecanismos de defensa. Hemos pasado a tener menos hijos por pareja y a que nazcan más niñas que niños.


La razón es puramente biológica. Como explica el profesor de genética humana Bryan Sykes en su famoso libro ‘La maldición de Adán’, la producción de machos en los mamíferos es muy cara, pues la competencia entre ellos consume mucha energía y es más fácil asegurar la pervivencia de nuestra carga genética con las hembras. En los humanos, la mayor vulnerabilidad y agresividad de los machos explica que en condiciones normales nazcan como media en el mundo 103,5 chicos por cada 100 chicas.

Sin embargo, como resalta el biólogo y neurocientífico Gerald Hüther, en épocas de gran estrés ambiental, como las guerras o las grandes crisis, donde las mujeres no se sienten bien, nacen menos niños que niñas, pues ante un futuro incierto los embriones masculinos mueren en los primeros dos meses de gestación.

Además, y según han demostrado varios estudios científicos, cuanta menos testosterona tienen los hombres menos hijos machos se engendran. Y estas épocas de vacas flacas le bajan las hormonas al más entusiasta ¿no os parece?

Yo tengo además otra teoría. Este desastroso mundo masculino sólo lo podrán salvar las mujeres. Y la naturaleza es sabia. Muy sabia.

César-Javier Palacios es geógrafo, naturalista, escritor, periodista y miembro de la Fundación Félix Rodríguez de la Fuente.